25 may 2011

PRECUELA

Benidorm, verano del 89.
El zíngaro, observaba el trasiego de turistas por el paseo marítimo. Era un morenazo guapísimo. Pero toda la atención era para su compañero, un chimpancé vestido de pijo. Polo "Lacoste", pequeños pantalones "Levi´s" y deportivas "Nike". Cuando el zíngaro lo consideraba oportuno hacia una señal al monete. Este se acercaba a los elegidos. Casi siempre eran familias con niños pequeños. El chimpancé se colocaba al lado del infante de la familia y le pasaba un brazo por los hombros, como colegas de toda la vida. Esto en la mayoría de los casos hacia mucha gracia a la familia, que accedía a que el zíngaro les hiciera una foto . Veinte duros por Polaroid. Al terminar el chimpancé plantaba un beso cargado de babas en el moflete del niño. Esto ya no les hacia tanta gracia.
-¿Cómo se llama el mono?- limpiando con un pañuelo el carrillo del niño.
- Lo llamamos Bomba, Bomba Guapa- contestaba el zíngaro.